Más allá del marketing verde: Cómo la sostenibilidad optimiza procesos y mejora la competitividad
Por: José Miguel Ansoleaga – Director ejecutivo de REPLICA (www.estrategiasreplica.cl)
Durante años, muchas empresas han tratado la sostenibilidad como un elemento de imagen: una forma de cumplir con estándares o mostrar compromiso frente a sus clientes. Pero hoy, la sostenibilidad ha pasado de ser una estrategia comunicacional a una verdadera palanca de eficiencia, ahorro y ventaja competitiva. En otras palabras, dejó de ser un costo y comenzó a ser una solución.
Integrar la sostenibilidad al modelo de negocio permite optimizar procesos operativos y reducir significativamente los costos. Un ejemplo concreto está en el uso de eficiencia energética en la industria vitivinícola: viñas boutique en el Valle del Maule que incorporaron paneles solares, iluminación LED y bombas de calor lograron una reducción de hasta un 30% en sus costos energéticos anuales. Y no solo eso: al generar parte de su propia energía limpia, disminuyeron su huella de carbono y aumentaron su valoración frente a importadores europeos que priorizan criterios sostenibles.
La sostenibilidad también habilita nuevas formas de financiamiento. A través de inversiones de impacto o instrumentos financieros verdes, muchas empresas han podido modernizar su infraestructura con tasas preferenciales, instalando tecnologías que no solo mejoran su desempeño ambiental, sino que reducen sus gastos operacionales. Es el caso de ciertos hoteles en la Patagonia chilena, que al implementar sistemas de reutilización de aguas grises y climatización eficiente, no solo bajaron sus costos fijos, sino que mejoraron la experiencia del huésped, logrando mejores evaluaciones y tasas de ocupación más altas.
Además, la sostenibilidad es una herramienta de diferenciación y posicionamiento. En mercados saturados, donde la calidad es un estándar, destacarse requiere propósito. Un vino con certificación orgánica o un hotel con prácticas regenerativas no solo responde a una demanda creciente, sino que conquista a consumidores que buscan coherencia y compromiso ambiental. Y esto se traduce en resultados: estudios de mercado indican que los productos sostenibles pueden aumentar su valor percibido entre un 15% y 30%, dependiendo del mercado objetivo.
La sostenibilidad bien aplicada no es un lujo, ni una moda. Es una estrategia tangible para competir mejor, gastar menos, acceder a nuevos mercados y fidelizar a un público más exigente. Ya no se trata solo de cuidar el planeta, sino de cuidar el negocio.
En REPLICA lo sabemos bien. Por eso diseñamos estrategias de sostenibilidad que impactan directamente en la eficiencia, los costos y el posicionamiento. Porque hoy, ser sostenible no solo es lo correcto. Es lo más inteligente.
Autor
José Miguel Ansoleaga
Director ejecutivo de REPLICA
(www.estrategiasreplica.cl)